El cabello es una de las partes de la anatomía femenina que más desgaste y maltrato sufre a causa de los tratamientos de belleza a los que le sometemos, los cuales incluyen rizadores, planchas, tintes, espumas, lacas y un amplio «etcétera» que acaba por debilitarlo perdiendo su brillo natural. Para evitar que esto suceda, vamos a proporcionarte unos consejos básicos para el cuidado del cabello, para que así tengas siempre una melena suave y cuidada.
El lavado del cabello es quizás una de las partes más importantes del cuidado del cabello, existe la falsa y errónea creencia de que lavarse el cabello frecuentemente es malo o que puede contribuir a que se estropee más rápido, pues lo cierto es que el cabello debe ser lavado asiduamente para eliminar residuos e impurezas del cuero cabelludo para que pueda respirar mejor.
Lo que sí no es bueno para la salud de nuestro cabello, es usar champús fuertes con muchos detergentes que podrían acabar debilitándolo, los champús comerciales que compramos habitualmente en el supermercado son demasiado ricos en sulfatos que estropean y endurecen la textura de nuestro cabello y demasiado astringentes para el uso diario. Si utilizamos un champú sin sales agregadas no existe ningún problema para que lo podamos usar diariamente y lavar el pelo cada día.
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Las siliconas son otro ingrediente de los productos cosméticos para el cabello que se incluyen en champús, suavizantes y mascarillas, este ingrediente favorece que el cabello se sienta suave en las primeras aplicaciones, pero tras el uso frecuente, se va adhiriendo al cabello formando una película que lo cubre y lo vuelve frágil y quebradizo, por ello es mejor elegir productos que no las contengan entre su composición, podemos identificarla como «Dimethicone».
Para acondicionar e hidratar nuestro cabello podemos usar aceites naturales, dependiendo de como sea nuestro cuero cabelludo, los cabellos secos reaccionarán muy positivamente a las mascarillas de aceite de olivas, una vez por semana es suficiente para apreciar los resultados.
Los cabellos grasos por el contrario, pueden usar mascarillas a base de aceite de jojoba, pues pese a ser una aceite, no aportará grasa adicional al pelo ni al cuero cabelludo, sino todo lo contrario, porque la jojoba tiene la propiedad de actuar en los folículos pilosos controlando la producción se sebo. Para que los aceites sean efectivos y aporten a nuestro cabello todas sus propiedades, deben utilizarse puros mediante extracción mecánica en frío (no refinados).
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