Una noticia corre por el mundo, los periódicos, redes, canales de música y noticias impactan a todos los públicos: David Bowie ha muerto. Un icono importante, una figura de culto, que, independientemente de lo mucho o poco que lo conocías, sabías toda su discografía o sus diferentes posturas, todos identificábamos a este emblema de la cultura pop que marcó no solo el mundo musical sino diferentes disciplinas del arte y la cultura, como en este caso, la moda.
David Bowie ha sido un punto de análisis en la moda no sólo por su estilo irreverente y original, sino por la influencia que ha ejercido en varios diseñadores. ¿Por qué llega a ser? ¿Por qué decirlo así? Sin darnos cuenta la asociación de la moda y el estilo permea completamente en lo que nosotros somos y queremos dar a conocer. Esa relación es grandiosa. Disfrutable. Y hasta cierto punto, impresionante.
Comencemos con Givenchy. En la colección de primavera/verano 2010 se revivió uno de los momentos más representativos de Bowie en 1973, la cual se representaba con un traje que entre líneas blanco con negro se manifestaba una nueva forma de vestir.
Con Miu Miu, en la temporada otoño/invierno 2012, Chloë Sevigny protagonizó una campaña encarnando a Bowie. Las plataformas, el rubio ligeramente rojizo y la actitud de Chloë es un claro homenaje a la leyenda de la música que nos acaba de dejar.
En revistas y editoriales, Bowie se manifiesta. Las ediciones Vogue británica y francesa le han rendido homenaje al cantante en muchos momentos de su historia, reivindicándolo como un eterno icono de la moda. Lo interesante de estas publicaciones, es que en portada no ha existido nadie que mejor represente el espíritu transgresor de Bowie que la eterna Kate Moss.
Después de que Tom Ford abandonara Gucci, Frida Giannini vistió a su ejército de modelos con una mezcla entre pieles y látex, que se movían al sonido y ritmo del glam influenciadas por el poder de David Bowie.
Una de las facetas más características de Bowie eran sus camaleónicos cambios. En 2011, Dries Van Noten dedicó toda su colección a la etapa Station to Station del artista.
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Prada también es una de las casas que abordó la influencia de Bowie en la moda. En 2012, Miuccia se obsesionó con el colorido y radical imaginario del artista, en una colección geométrica, llena de formas y colores vibrantes.
Jean Paul Gaultier es el diseñador excéntrico y radical que también participó en este homenaje, ya que además su afición y elogió por uno de los estandartes de la cultura pop se reflejó en la colección primavera/verano’13, recreando a la perfección este brillante momento como una oda al glam y a Bowie.
David Delfín es un diseñador español que ha dado mucho de que hablar, con la colección otoño – inverno 2010, mostró cómo veía al cantante a través de su personal y minimalista forma de entender la moda. Para el desfile, Bimba Bosé se convirtió en Bowie de inicios de los años setenta.
Walter Van Bereindonck en su colección otoño – iniverno 2013, presentó una visión de la moda con una gran influencia gráfica y colorista.¿Su más grande influencia? Bowie, para su desfile, el diseñador inundó de relámpagos y diamantina los looks de la colección.
Y para terminar, Bowie no solo fungió como emblema e inspiración, sino que además protagonizó un fashion film al lado de Arizona Muse «I’d Rather Be High», es una verdadera delicia audiovisual que nos hace admirar y respetar a este icono mundial.
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